Por: Don Filemón
¿Qué pasó mi plebe? ¿Cómo los trata la vida? Espero que muy bien jijos del mais’; aquí andamos de retache a esto de La Gorda Magazine, como se ha hecho vicio –del bueno- el que me echen sus mensajes y toda la cosa en eso de redes, no soy muy conocedor, pero hay la llevamos poco a poco.
Te saluda nuevamente tu amigo Don Filemón pa’ servirle a Dios y asté mero que tiene la revista en sus manos, porque en esta vida hay que ser agradecido y yo lo estoy. Pues aquí andamos al puro centavo sí ‘iñor, dándole duro a esto del jale.
Verdad de Dios que a veces uno se sorprende de la vida, esta juventu’, la chamacada, anda bien revolucionada y haciendo cosas que uno se queda con la trompa abierta.
He de confesar que, en mi época dorada, cuando uno era muchachito, además de mi música favorita norteña, me gustaba otros géneros, los románticos, esa música que podías cantarle a tus conquistas.
Bueno, José María Napoleón era uno de mis favoritos, porque justo en esa época, me tocó una jija de la tostada –mayor que yo- que cómo me hizo sufrir, fue la autora intelectual de comprar cajas y cajas de tequila que se fueron directo a mi riñón.
Recuerdo esto, porque hace un par de días venía del pueblo al rancho escuchando la radio y pusieron una canción a toda madre, justo del Napoleón, pero quien la cantaba era un muchachillo, Gabriel Vival.
Jijodelamañana, me hizo acordarme de mis copitas y cuántas veces canté “Pajarillo” a todo pulmón y todos los momentos de esa época; porque he de confesarles que el Filemón también echa la lágrima de vez en cuando.
Como ya le sé puchar a eso del celular, me fui al barecito en la casa, y le di a eso del ‘espotifay’ pa’ buscarlo, después al ‘yutube’ para conocerlo a este chiquillo y ¡Nombre!, está bien morro.
La canción de por sí me gustaba, pero este muchachito le puso algo que me hizo escucharlo una y otra vez; me recordó a un viejo amigo, porque se parecen mucho, nada más que este Gabriel Vival está más fortachón y cantando como dicen los regios: “¡con madres!”.
Al calor de las copas, lo seguí escuchando y la verdad no sé cuántos tequilitas más me eché, perdí la cuenta, pero la verdad que recordar esos viejos tiempos y disfrutar la buena música, son placeres de la vida.
Bueno mi plebe, el espacio se termina y to me despido, nos vicentiamos en eso de las redes sociales, ¡hay mero me encuentran!
Conoce a Don Filemón
Es el mayor de nuestros colaboradores; respetable, pícaro pero muy pulcro. Hombre surgido en las entrañas del campo, hoy es un gran hacendado. Gusta de los viajes y hacer amigos. Apasionado de la música grupera y el buen tequila. Auténtico hombre de familia, cuyo único temor se encuentra en casa en la figura de su señora.
Texana impecable, siempre viste camisa a cuadros, bigote al puro estilo de Emiliano Zapata y pantalones vaqueros.
Y recuerda: ¡Si no está en SAPS Grupero… seguro no ha sucedido!
