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Hijos De Barrón – Cortinas Guindas 

¿Qué estarás haciendo?
Tal vez ya estás dormida
o estás despintándote
o decorando tus uñas

Hoy estoy de amigo con la luna,
la verdad no atrapo el sueño
me siento algo grave
pero también contento

Dime que me quieres
tú dime que me amas, dímelo por favor
dime que me quieres
dime que me extrañas, dímelo corazón

Las cortinas de aquel cuarto eran guindas
tu tierna piel es trigueña
yo cuando te miro, mis ojos me brillan

¡Oh cortinas guindas!
las que estuvieron presentes
en aquella noche de caricias

¡Oh cortinas guindas!
las que estuvieron presentes
en aquella noche de caricias

Las cortinas de aquel cuarto eran guindas
tu tierna piel es trigueña
yo cuando te miro, mis ojos me brillan

¡Oh cortinas guindas!
las que estuvieron presentes
en aquella noche de caricias

¡Oh cortinas guindas!
las que estuvieron presentes
en aquella noche de caricias.

 

A mediados del año 2009 empieza profesionalmente la trayectoria del grupo Hijos de Barrón, originarios de Angostura, Sinaloa, un pueblo situado a 60 millas aproximadamente de Culiacán, la capital sinaloense. Su pasión y gusto por la música ranchera con guitarras los une y forman dicha agrupación la cual lleva un nombre muy original ya que dos de integrantes son hermanos y llevan el apellido Barrón y fue el mismo publico de aquella región quien se refiriera a ellos con ese nombre desde tiempo atrás. El grupo esta compuesto por José Iram Barrón Ramos (guitarra y primera voz), Jesús Iday Barrón Ramos (guitarra) y David Alonso Leyva Gómez (bajo eléctrico y segunda voz).

Hijos de Barrón saca su primer material discográfico a finales del año 2011 y lleva por titulo «PUROS CORRIDOS» el cual incluye el corrido “El Proceder de Manuel” con el cual se dieran a conocer nacional e internacionalmente al ser uno de los corridos mas aceptados por el publico en el año 2012.

Erick Cuesta

Con orgullo edito, redacto y creo noticias e información sobre el género Regional Mexicano en SAPS Grupero, La Revista Digital. Hay quienes hacen música y la interpretan; yo solo escribo para ella. Ya lo dijo Octavio Paz: "Escribo para que la muerte no tenga la última palabra".

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