Letra Bonita Cantinera – Chuy Lizárraga y su Banda Tierra Sinaloense
Me sobró una moneda de diez
Me gustó la canción treinta y tres
La rockola empezaba a tocar
Mientras que su mirada me empezó a enamorar
Preguntó quiere usted un mezcal
Por favor dos con limón y sal
Se sentó, comenzamos a hablar
Y entre copas y charlas me empezó a enviciar
Bonita cantinera para esto
Me están volviendo loco tus placeres
Y no hay necesidad si aquí me tienes
Si aquí me tienes de lunes a domingo si tú quieres
Bonita cantinera ya no sigas
Si tú solo serías mi consejera
No seas juez y parte en mi loquera
En mi loquera, lo sé no hay quien me bese a tu manera
Pero déjame ir
Ya dime adiós
Bendita cantinera
Me besó yo también la besé
Terminó esa noche en hotel
Se acopló a mi forma de ser
Y de todo su encanto de ella me enamoré
Y creció como nunca debió
Nuestro amor se salió de control
Y a pesar que la cantina pasó
Ahora estoy enviciado y no es por una canción
Bonita cantinera para esto
Me están volviendo loco tus placeres
Y no hay necesidad si aquí me tienes
Si aquí me tienes de lunes a domingo si tú quieres
Bonita cantinera ya no sigas
Si tú solo serías mi consejera
No seas juez y parte en mi loquera
En mi loquera, lo sé no hay quien me bese a tu manera
Pero déjame ir
Ya dime adiós
Bendita cantinera.
Letra Bonita Cantinera – Chuy Lizárraga y su Banda Tierra Sinaloense
Dueño de un carisma único, una voz con un sello propio, con un gran poder interpretativo y un cantante inquieto sobre el escenario son las características que hacen de CHUY LIZÁRRAGA un artista único en su género. Siempre de buen humor y con la sencillez a flor de piel se ha hecho merecedor del título de “El Amo del Escenario”.
Nacido el 09 de noviembre en Mazatlán Sinaloa, el cantante ha forjado su carrera con trabajo y esfuerzo cautivando al público de México y Estados Unidos. Son más de 13 años en el mundo musical, años que le dieron tablas, estilo y ganas de superarse siempre. CHUY LIZÁRRAGA es una persona que aprovecha las oportunidades. Trabajaba en una discoteca local en Mazatlán, participó en un concurso de aficionados, llegando a los finalistas y desde ese momento inició un difícil recorrido por los escenarios, pero su optimismo y ganas de triunfar lo empujaron siempre, pues se dio cuenta que la música ya era parte de su vida.
