El cantante Gerardo Ortiz se coronó como el “Artista Norteño Del Año” en los Premios lo Nuestro de 2013, el cual celebraba lo mejor de la música latina.
Durante el evento, el compositor nacido en Estados Unidos (EEUU) subió al escenario principal e interpretó un tema que resultaba atípico para una ceremonia realizada en Miami, Florida.
Se trata de un Narco-Corrido sobre Dámaso López Serrano, alias “El Mini Lic”, operador criminal que en 2017 se convirtió en el miembro de más alto rango del Cártel de Sinaloa en entregarse a las autoridades estadounidenses.
La canción fue incluida en el tercer álbum de estudio de Gerardo Ortiz, lanzado en septiembre de 2012 bajo el sello discográfico Del Records, con el título “EL PRIMER MINISTRO”.
El Corrido, de aproximadamente tres minutos de duración, está dedicado al hijo de Dámaso López Núñez, alias “El Licenciado”, conocido por haber sido un cercano colaborador de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
En poco tiempo, la pieza musical alcanzó gran popularidad entre los oyentes, al grado de ser nominada a la categoría de “Canción Regional Mexicana Del Año” en los Premios Billboard Latinos de 2014.
Aunque el Narco-Corrido sobre “El Mini Lic” no resultó ganador (el galardón fue entregado a La Arrolladora Banda El Limón por la canción “El Ruido De Tus Zapatos”).
Gerardo Ortiz recibió el premio de “Artista Del Año” en la categoría del Regional Mexicano, de manera que se posicionó como uno de los máximos exponentes en el género.
A lo largo del tema musical no se menciona el nombre completo de “El Mini Lic”. Tampoco se nombra al Cártel de Sinaloa o a “El Chapo” Guzmán.
Pese a ello, la letra de la canción hace referencia a sus vínculos con dicha organización criminal.
“Sí señor, yo soy Dámaso. Soy hijo del Licenciado. De Culiacán y mi gente siempre he tenido el respaldo. Yo estoy porque me pusieron, les agradezco ese gesto. Yo vivo pa’ la gerencia y a mi padrino respeto”.
Se escucha al inicio del Narco-Corrido.
La primera parte hace referencia a los nexos que Dámaso formó al interior del Cártel de Sinaloa gracias a su padre y a “El Chapo”, con quien estableció una relación tan cercana que fue su padrino de bodas.
Asimismo, se menciona que “El Mini Lic” solía operar en Culiacán, el principal bastión de la organización a la que pertenecía.
“También me gusta la fiesta. Pasear las fresas de Culiacán a Guadalajara. Jalar la banda, aguas heladas, mi empresa paga. Y que a mi gente no le falte nada. Si me acompañan los plebes, asegurado, pues siempre vienen bien ensillados. Las calles arden, yo estoy alerta. Para mi gente, el mini licenciado”.
Se escucha a mitad de la canción.
Este fragmento se repite al final del Corrido y hace referencia a los pasatiempos favoritos de Dámaso: pasear por carros de lujo en exclusivos fraccionamientos de las ciudades mencionadas.
Asimismo, en otra parte del tema se describe a “El Mini Lic” como un “hombre de palabra” y “enamoradizo” que siempre traía una pistola consigo.
Durante su juventud, Dámaso estableció una relación de amistad con los hijos de “El Chapo” Guzmán, mejor conocidos como “Los Chapitos”, la cual se rompió previo a la captura de su padre realizada en mayo de 2017 en la Ciudad de México (CDMX).
Ante ello, “El Mini Lic” optó por entregarse a las autoridades de EEUU en la entrada Oeste de Calexico, California.
En 2018, el hijo de “El Licenciado” se declaró culpable ante un tribunal federal de EEUU por cargos relacionados con el tráfico de drogas.
Después de permanecer cinco años tras las rejas, Dámaso obtuvo una libertad condicionada gracias a su colaboración con el país vecino.
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Con información de: INFOBAE
