Las alas de color tienen un alma creativa, un especialista en la creación literaria y musical para dar vida a melodías legendarias que permanecerán con el paso del tiempo, de los años, décadas y milenios; nos referimos a Jorge Mejía Avante de Los Ángeles Azules.
Nacido en el Barrio de San Lucas en la Delegación Iztapalapa en la Ciudad de México, Jorge Mejía Avante vio luz por primera vez un 26 de noviembre. Es el menor de los ocho hijos de los señores Porfirio Mejía García y Martha Avante Barrón.
Desde pequeño demostró esa inquietud musical, por lo que ingresa a temprana edad a la Escuela Libre de Música y un año después al Instituto de Bellas Artes, se hace un especialista con la trompeta en el Conservatorio Nacional de Música donde estudia solfeo, percusiones, armonía, banda sinfónica, entre otros.
Paralelamente logra egresar como ingeniero arquitecto en la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura (ESIA) del Instituto Politécnico Nacional (IPN). Aunque su vida estaba destinada a la música.
Durante todo este tiempo, sus padres fueron piedra angular en su formación, ya que le brindaron el apoyo y armas para desarrollar su más grande pasión: la música.
Su creación se desarrolló a temprana edad, a los 15 años ya tenía las primeras composiciones: 45 cumbias que eran interpretadas por un naciente grupo creado por sus padres en 1978: Los Ángeles Azules.
Los inicios fueron duros, pero la vida se encargaría de colocar al grupo en la cúspide del género, convirtiéndolos en auténticos ídolos en el continente americano.
Los éxitos de Jorge Mejía se han replicado en las voces de Saúl Hernández, Carla Morrison, María José, Lila Downs, Jay de la Cueva, María León, Ximena Sariñana, Leonardo de Lozanne, María Barracuda y Vicentico, entre otros.
Hoy día cuenta con más de 170 cumbias grabadas en 20 discos e interpretadas por Los Ángeles Azules, producciones que incluyen sus letras, su música y sus arreglos musicales plasmados en partitura. En las grabaciones, Jorge llegó a ejecutar hasta siete instrumentos aprovechando la separación de canales de la consola de audio.
De las anécdotas que recuerda Jorge Mejía Avante es que un locutor de La Hora Nacional le confesó después de interpretar “Como Te Voy A Olvidar” “que se le había puesto la piel chinita”.
Para el maestro Mejía, llamado en alguna ocasión “Niño Orquesta” por tocar diez instrumentos, no hay fórmula para el éxito, éste llega con el trabajo, la constancia, la perseverancia y la responsabilidad.
“Me siento agradecido y afortunado porque Dios me regaló la inspiración para poder componer canciones y mis padres me dieron su dedicación y apoyo”, asegura.
Y recuerda: ¡Si no está en SAPS Grupero… Seguro no ha sucedido!
Por: Iván Agüero / La Gorda Magazine
