Daniel Cisneros vio cristalizado su sueño de grabar la canción “Cuando yo quería ser grande”, tema que desde hace varios años quería incluir en sus discos, sin embargo, por circunstancias ajenas a él no era posible, empero, hace dos semanas se metió al estudio de grabación y plasmó el tema, el cual ya se escucha en las diferentes radios de la ciudad.

El también conocido como “El Principe”, dijo que el tema está lleno de recuerdo, pues solía cantarlo en las fiestas familiares. Con voz nostálgica el músico indicó que el año pasado fue la última vez que le cantó la melodía a su padre, el conocido médico Guillermo Cisneros López, quien fallecerá el 25 de junio del 2017 en Moctezuma, Sonora.

“Desde que tenía 15 años canto esta canción y desde hace varios años tenía la inquietud de grabarlo pero nunca lo hice, el Día del Padre es este domingo y mi papá va a cumplir un año de fallecido, es por eso que hace dos semanas dije ‘la grabo’, hablé con la banda y nos metimos al estudio de grabación”, narró.

En 2011, Daniel Cisneros grabó su ultimo material discográfico del cual se desprendió el éxito “El Que Enamora Casadas”, desde entonces el intérprete se ha mantenido alejado de los reflectores, pero poco después de la muerte de su padre y de un receso, tomó la decisión de grabar temas y de esta forma retomar su carrera artística, aunque no se ha mantenido alejado completamente de los reflectores.

Con más de dos décadas de experiencias, Daniel Cisneros indicó que hace falta intérpretes que realmente canten música Regional Mexicana, ya que considera que las nuevas generaciones han echado a perder el género.

“Mis respetos para las nuevas generaciones, pero en lo personal no me gusta, están echando a perder la música Regional Mexicana, es una vergüenza escuchar tanta tontería en la radio, denigran a la mujer, incluso hasta las propias mujeres han perdido la dignidad y ellas mismas se han perdido el respeto y la dignidad al permitirlo, pues las traen tocando en sus carros o casas”, indicó.

Desde los 8 años, Daniel Cisneros sentía la inquietud por la música, pero fue hasta años después que se decidió a cantar de manera amateur en un conocido lugar de la ciudad, en donde los viernes amenizaba el ambiente.

Fue Humberto González quien lo acercó a Manuel Fernández, y este al ver su calidad interpretativa no dudó en llevarlo a estudios Arriola a grabar su primer material discográfico en 1996, de donde se desprendieron éxitos como “Dólares Falsos”, “Avioneta Peruana”, “Los Dos Socios”, “De Norte A Sur”, entre otros con los cuales despegó su carrera artística.